Que tu casamiento o el día que festejas tus 15 son instantes importantes no es novedad. Por eso, como profesionales de la imagen y el video, nos gusta pensar recomendaciones para que además de brillar puedas guardar para siempre tu recuerdo. Cuando los invitados son muchos, una opción es brindar un servicio de segunda cámara, tanto para fotografiar como para grabar.
Si las personas que concurren son más de 200, tener dos profesionales con responsabilidad de captar momentos especiales garantiza que nadie se quede sin retratos, y que el clima de la fiesta quede registrado. Cuando trabaja un solo especialista en un salón muy grande repleto de personas, se concentrará en lo más relevante y al momento de tomar las imágenes tendrá que priorizar entre no perderse nada de los protagonistas y captar algún gesto divertido de alguien más.
Al elegir este servicio, habrá un fotógrafo dedicado a captar las escenas centrales y seguir a los protagonistas: tanto novios, suegros y padrinos; como la quinceañera, sus padres y hermanos. El segundo fotógrafo, estará encargado de lo que en el rubro se conoce como “detalles”, es decir cómo se decoró el salón, la reacción de los invitados ante los shows y las sorpresas, algún pasito divertido en el carioca, un abrazo entre familiares que se reencuentran después de muchos años. La misma lógica será empleada en el video.
Un doble servicio de fotografía y video es casi obligatorio para las fiestas con muchos invitados, cuando se quiere una cobertura precisa y agradable.